Wenn wir einen Menschen hassen, so hassen wir in seinem Bild etwas, was in uns selber sitzt. Was nicht in uns selber ist, das regt uns nicht auf.
"Cuando odiamos a
un hombre, odiamos en su imagen algo que se encuentra en nosotros mismos. Lo
que no está dentro de nosotros mismos no nos inquieta"
Demian, Hermann Hesse [Capítulo
6, Pistorius].
“La droga no tenía acción selectiva: no era diabólica ni
divina”
Como el bottox, lo que
cuenta es la aplicación.
“De ahí que, aunque entonces tuviese dos caracteres lo mismo
que dos cuerpos, el uno era totalmente malvado, en tanto que el otro seguía
siendo el del viejo Harry Jekyll, el incongruente ser compuesto […]. El
desplazamiento era, así, enteramente hacia lo peor.”
Me pregunto qué clase
de historia habría resultado si el desplazamiento hubiera sido hacia lo mejor. Una
especie de Pinocho que es, a un tiempo, el Pepito Grillo de Geppetto.
“Mi nuevo poder me tentó hasta convertirme en un esclavo.”
“Sonreía ante aquella realidad que en esa época me parecía graciosa”
¿Inconsciente del
peligro, temerario?
“Así protegido, como yo suponía, por todos los flancos
comencé a disfrutar de la extraña impunidad que me confería mi posición.”
El ser humano no puede
controlar todas las variables. No existe el crimen perfecto.
“Muchos hombres han pagado a otras personas para que éstas
lleven a cabo sus crímenes, mientras ellos mismos y su reputación se hallan a
salvo. Yo era el primero que los cometía, personalmente para mi propio placer. El primero que podía presentarse ante la
opinión pública con su apariencia de simpática
respetabilidad y, […], saltar las barreras y salir al mar de la libertad. Mas,
para mí, en mi manto impenetrable, la seguridad era completa.”
Esta es la idea que
está detrás del texto de Javier Marías en Los enamoramientos. Supongamos que
alguien tiene garantizada la impunidad, ¿qué puede empujarle a dominar sus
pasiones y a no actuar de acuerdo con sus propios intereses?. Su conciencia del
deber.
Pero aquí hay una
hipocresía. Cuando uno actúa conforme al deber por miedo al castigo no actúa
moralmente. Kant distingue dos tipos de acciones: contrarias al deber y
conformes al deber. Dentro de las últimas distingue: Conforme al deber por
deber y Conforme al deber por inclinación. Solamente las primeras poseen valor
moral. El valor moral de una acción no radica en algún propósito a conseguir sino
en la máxima por la cual ha sido resuelta: “el cumplimiento del deber”.
El imperativo categórico
kantiano tiene tres formulaciones:
1. «Obra sólo según una máxima tal, que puedas querer al mismo
tiempo que se torne en ley universal».
2. «Obra de tal modo que trates a la humanidad, tanto en tu
persona como en la de cualquier otro, siempre como un fin y nunca solamente
como un medio».
3. «Obra como si por medio de tus máximas fueras siempre un
miembro legislador en un reino universal de los fines».
Vemos cómo se expresa en casi todas las religiones y/o tradiciones
morales/filosóficas: 1) Budismo: “No lastime a los demás en las maneras en las
cuales usted mismo encontraría dañinas” (Udana-Varga 5:18). 2) Confucionismo:
“No hacer a los otros lo que no quieras que los otros te hagan a ti” (Analects
15:23). 3) Hinduismo: “Esta es la suma del deber: no hacer a los otros lo que
te causaría dolor si te lo hicieran” (Mahabharata 5:1517). 4) Humanismo: “No
hagas cosas que no te gustaría que te hicieran” (La Sociedad Humanista
Británica). 5) Islam: “Ninguno de ustedes cree hasta que desea a su hermano lo
que desea para sí mismo” (Hadiths de Imam Al-Nawawi). 6) Jainismo: “Un hombre
debería manejarse tratando a todas las criaturas como le gustaría que le
tratasen” (Sutrakritanga 1.11.33). 7) Judaísmo: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”
(Levítico 19:18).
Según estos
principios, el doctor Jekyll no debería sentirse ajeno cuando su alter ego, el
señor Hyde, viola esta máxima. Debería hacer lo posible y lo razonable por
procurar el triunfo de la razón sobre las pasiones.
“Harry Jekyll sería el hombre que podría darse el lujo de reírse
de las sospechas.”
El doctor Jekyll es el
cómplice de Hyde y lo está encubriendo. ¿Acaso no es responsable? Incluso
aunque se tratase de otro hombre. Estaba pensado ahora en el papel de María
Dolz en Los enamoramientos. Parece que ella conoce el móvil del asesinato de Miguel
Desvern pero no hace nada por resolverlo. Se mueve en una pasiva indiferencia. El
problema es más grave porque no parece que sea sólo ella. Nadie parece
interesado en remover el caso. Ocurre lo mismo en el final de la película de Match
Point.
“Frecuentemente me hundía en una especie de asombro ante mi propia depravación. Aquel
ser tan familiar que yo sacaba de mi propia alma y que enviaba , solo, en busca
del placer, era inherentemente maligno y depravado; sus actos e ideas se
centraban en el yo; con bestial avidez libaba el placer de cualquier grado de
tortura sufrido por otro; era insensible como estatua de piedra. En ocasiones,
Harry Jekyll, se horrorizaba de los actos de Edward Hyde, mas la situación se
apartaba de las leyes ordinarias e insidiosamente tranquilizaba, así, su
conciencia. Después de todo, el culpable era Hyde, y sólo Hyde.”
Supongamos que el
doctor Jekyll es la sociedad y el señor Hyde es la oveja descarriada. Me parece
que no basta con horrorizarse, consentir y desentenderse del problema como si
no tuviera nada que ver con él. El señor Hyde también es un miembro de la
sociedad y algo habrá que hacer. Para empezar, tratar de que caiga sobre él
todo el peso de la ley.
Siempre buscamos
mecanismos para tranquilizar nuestra conciencia, para no sentirnos responsables
de nada de lo que ocurre a nuestro alrededor. Una y otra vez volvemos a la importancia
de la educación, el civismo y el sentido de la responsabilidad personal. Somos
conciencias adormecidas que apenas se conforman con reparar el mal [hacer
justicia]. Debiéramos trabajar más y mejor por evitarlo apuntalando la buena educación
y el civismo.
Me parece que la
trilogía de Javier Marías [Tu rostro mañana] gira en torno a este tema.
Nadie puede estar
seguro de sí mismo, de cómo actuará mañana.
¿Qué ocurre si uno
descubre que el Estado es una especie de doctor Jekyll y Mr. Hyde?
¿Cómo podrá defenderse
de él?
"Cuando se teme a alguien es porque a ese alguien le hemos concedido
poder sobre nosotros".
Demian, Hermann
Hesse, [Capítulo 2, Max Demian]
Wenn man jemanden fürchtet, dann kommt es daher, daß man diesem Jemand Macht über sich eingeräumt hat.
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